Novena edición de la ViboMask de Viana do Bolo y, pese al tiempo que aventuraba una lluvia que no llegó, nuevo éxito de convocatoria, aunque con menos público que en ediciones anteriores y con alguna que otra baja de última hora de los entroidos confirmados.
Xinzo de Limia envío a tierras vianesas una nutrida representación de su Entroido, en el que iban escenificando por las calles de villa anfitriona su característico Domingo Oleiro. No faltó, por supuesto, la figura más representativa de la fiesta antelana: su pantalla.
Sea como fuere, Viana do Bolo es ya referente en el panorama internacional en lo que a concentración de máscaras de diversos carnavales se refiere.
Durante este fin de semana se concentraron, entre Vilariño de Conso y Viana do Bolo, una amplia representación de estas ancestrales fiestas, algunas llegadas incluso desde Italia. No faltaron tampoco los portugueses, ni los vascos, cántabros o castellanoleoneses.